la naturaleza en brazil

El Parque Nacional do Iguaçu con una extensión de 220.000 has. de las cuales 170.000 en Brasil y 50.000 en Argentina, y declarado por la UNESCO en Patrimonio de la Humanidad, se puede disfrutar de la convivencia con las fuerzas de la naturaleza y el luminoso y eterno espectáculo de las aguas que se junta con el descubrimiento de la exuberante fauna tropical, que incluye varias especies amenazadas de extinción. En el parque, donde la caza está prohibida y, sin embargo, se permite la pesca, la propia floresta (subtropical de hoja ancha) no tiene nada que envidiar a la Floresta Amazónica, lo que sólo por sí misma justifica el creciente flujo ecoturístico hacia la región.

Foz de Iguaçu (agua grande), famosa ciudad donde se encuentran las cataratas del mimo nombre, cuatro veces más extensas que las cataratas del Niágara, y sin duda las más espectaculares de América del Sur, las cataratas de Iguaçú arrojan sus poderosas aguas a un cañón profundo. Varias islas dividen la enorme corriente en 275 saltos de agua, de 60 a 80 m de altura, elevando las espumas coloreadas por el arco iris a más de 150 m. Las islas más conocidas son: San Martín e Isla Grande que se encuentran río arriba, dividiéndolo en dos brazos que se juntan poco después, cayendo a través de rudas formaciones de basalto y de lava hasta chocar en la Garganta del Diablo, donde el río prosigue hasta desembocar en el río Paraná y, de ahí, a través del río Paraguay, para así contribuir a la formación de la Cuenca del Río de la Plata. En el año 1984 fue declarado Patrimonio Natural de la Humanidad por la UNESCO.



jorge 

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